A la hora de lanzar un nuevo blog es muy importante plantear una estrategia que logre generar tráfico de visitas. Con toda la información que puede encontrarse en internet, un nuevo blog es un grano de arena en el desierto. Relacionar blog y redes sociales puede ayudar a arrancar, sin duda.
Está claro que se deben hacer esfuerzos en muchos sentidos como marcar objetivos (SMART), planificar una estrategia SEO y cuidar mucho la calidad de los contenidos. Pero apoyarse en las redes sociales para lograr tráfico a un nuevo blog también puede influir mucho.
Cada red social es diferente
Hay que entender que no pueden mostrarse todos los contenidos de la misma forma en una red social que en otra.
Si se quiere lograr una buena relación entre el blog y las redes sociales, debe entenderse qué puede aportar cada una al blog. También cómo pueden relacionarse los contenidos entre diferentes redes sociales. Siempre teniendo en cuenta que a donde finalmente se quiere dirigir al usuario es al blog.
Por poner sólo un ejemplo, en Twitter la esencia es la frase, 140 caracteres que deben impactar en el usuario. Luego se pueden incluir imágenes como elemento más de apoyo, secundario.
En Facebook la imagen suele ser la que decide si se impacta o no en un usuario. Los titulares pueden ser más extensos e incluir un subtítulo. Podría decirse que los elementos de un post en cada red social tienen una importancia inversa.
Otro aspecto apreciable, es cómo funcionan los muros de cada red. Twitter es un flujo incesante de información y genera unos diálogos directos y incisivos. Facebook, aunque también genera un flujo importante de post, tiene un carácter ligeramente más pausado. Permite reflexiones mayores y crea conversaciones más densas.
Se debe analizar los usuarios de cada red, y cómo se les quiere y puede atraer a un blog concreto.
Lo que se da por supuesto, es que se use la red social que se use, el tono debe marcarlo el blog. No puede haber un gap editorial entre cómo se comunica en el blog, elemento central del ecosistema digital, y cómo se comunica en las redes sociales.
Planificar publicaciones entre blog y redes sociales
Un aspecto muy importante es planificar la frecuencia de las publicaciones. Se deben contemplar al menos dos aspectos clave en relación a esto. Uno sería la periodicidad, cada cuánto tiempo se publica contenido. Y el otro la constancia, no desaparecer.
Respecto al primero hay que tener muy claro qué tipo de contenidos se ofrecen, y cómo se consumen.
Hay contenidos que no «cansan» al usuario, y dan un mayor margen para el «bombardeo». Pero existen otros contenidos que requieren silencios mayores. Al usuario le gusta consumirlo en píldoras, que le permitan reflexionar e incluso descansar.
Esto puede definir dicha periodicidad. Al relacionar blog y redes sociales tener esto presente puede ayudar al éxito de dicha relación. Quizá se desee tener un blog constantemente actualizado, y esto puede responder a una estrategia bien definida.
Pero en redes sociales hay que saber mantener un equilibrio en las publicaciones, ya que el exceso de post, de visibilidad, puede ser contraproducente. Hay que buscar ese equilibrio, y el análisis de la actividad de los usuarios ayudará a lograrlo.
Es fundamental también saber medir las fuerzas. Quizá al comienzo de la publicación de un blog se tengan varios contenidos preparados para su publicación. Se puede ir visualizando qué se va a contar a los usuarios y se quiere mostrar todo ya.
Lo ideal es no precipitarse, y atendiendo al punto anterior, hacer una buena planificación de publicaciones.
Así en épocas con mayor inspiración se podrán generar contenidos que ayuden a cubrir momentos de menor productividad.
Como se dice ambos aspectos están más que relacionados, y el aportar al usuario una rutina en las publicaciones ayuda a que comprenda el funcionamiento blog y las redes sociales. Y el no tener temporadas de muchísimas publicaciones y otras de desaparición del mapa, también favorece la fidelización.
Picos de máxima actividad en redes sociales
Si se ha logrado establecer una regla o estrategia para los puntos anteriores, ahora llega el momento de analizar la actividad puntual de los usuarios. Es decir, a qué horas del día están más activos en las redes sociales.
Aunque se puede profundizar más aún. Un usuario puede tener dos tipos de comportamientos en redes. Uno más de paso, de cubrir un tiempo muerto, donde posiblemente solo eche un vistazo rápido, sin llegar a profundizar en los contenidos publicados.
Y otro, el que interesa más, de consumo real de contenidos. El usuario tiene tiempo y accede a las redes a consumir contenidos e información. Estos son los momento que son más interesantes para compartir contenidos. Este segundo comportamiento es que generará tráfico entre un blog y redes sociales.
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Del blog a la red social
Se ha estado viendo cómo tratar los contenidos de un blog para compartirlos en redes sociales, y qué aspectos tener en cuenta y cuidar más. Esto no debe dejar en el olvido que el contenido, la esencia de esta relación, se encuentra en el blog.
Para generar tráfico entre blog y redes sociales, los propios usuarios son fundamentales. La viralidad.
Para esto existen trucos interesantes que ayudarán a fortalecer esta relación. En general el usuario de internet es vago, está acostumbrado a que le de todo hecho. Si pudiera reducir su esfuerzo a pulsar un botón sería feliz, y participaría mucho más.
Para apoyar la teoría del mínimo esfuerzo se aconseja escribir frases twitteables en los artículos. Si se acierta a lo hora de escoger dichas frases, es muy probable que el usuario la comparta. Si se logra que se sienta identificado con lo que esa frase transmite sobre el artículo, hay muchos puntos a favor para comenzar a mover dicho post.
A veces un usuario no sabe cómo expresar lo que quiere transmitir de una lectura, hay que tratar de hacerlo por él.
En Facebook el uso de títulos llamativos e imágenes atrayentes puede marcar la diferencia entre un clik y un scroll. Por lo que esto se debe tener muy presente a la hora de definir cómo se compartirá un post en dicha red social. Hay que cuidar estos detalles, y la imagen debe aportar información, debe servir casi de titular.
Mientras que los textos tienen que apoyar y reforzar a la imagen, resolver cualquier duda que esta pueda crear.
Cuidando bien estos aspectos, es muy probable crear una relación entre blog y redes sociales muy fructífera.